Las autoridades de Honduras deben negociar con Estados Unidos la eliminación del arancel del 10% a los productos hondureños para evitar efectos negativos sobre la economía nacional, propuso el economista, Roberto Lagos.
«La Presidenta Xiomara Castro debe sentarse y liderar la negociación, ya sea con funcionarios del Departamento de Comercio, del Departamento de Estado, o con el vicepresidente de Estados Unidos. Y si es posible, con Trump», señaló Lagos.
El analista indicó que los aranceles impuestos por Trump a nivel global «son una estrategia para llevar a los países a una mesa de negociación» y aseguró que los líderes de varias naciones ya están negociando la eliminación de los aranceles.
Roberto Lagos advirtió que el arancel del 10% para Honduras puede beneficiar a algunas industrias en el corto plazo, pero a largo plazo tendrá efectos negativos sobre la economía en general.
«Las medidas arancelarias de Estados Unidos nos afectan a todos. En este momento, (en Honduras) estamos siendo competitivos debido a la diferencia de arancel, pero si esa diferencia se elimina en las próximas semanas y Honduras no logra eliminar ese arancel del 10%, la economía se verá afectada», afirmó.
Por su parte, el canciller hondureño Eduardo Enrique Reina, señaló que Honduras tiene derecho a la reciprocidad, o sea imponer aranceles a productos estadounidenses, pero la estrategia actual es dialogar y negociar con el gobierno norteamericano para volver al arancel cero que se tenía antes para el ingreso de sus productos.
La posición de la mandataria hondureña Xiomara Castro es mantener la buena relación que se tiene con Washington y que favorecen el diálogo y la negociación directa, señala.