La Fiscalía Local de Choloma, Cortés, solicitó en audiencia de individualización de la pena, 32 años con ocho meses de reclusión contra Christopher Samir Álvarez Canales, Wilson Ortiz Castellanos y Yuri Francisco Benítez Zavala, por los delitos de robo con violencia o intimidación agravado continuada, violación y otras agresiones sexuales.
Durante la audiencia se plateó que por el delito de robo con violencia o intimidación agravado continuada se les impongan 18 años con ocho meses de cárcel; por violación nueva años, y por otras agresiones sexuales cinco años, para una suma total de 32 años con ocho meses de cárcel.
Los ahora señalados, se introdujeron a una vivienda en Choloma el pasado el 18 de abril de 2023, de donde se alzaron con varios teléfonos celulares, joyas, dinero en efectivo, televisores, computadoras, entre otros objetos de valor; para posteriormente abusar sexualmente de una fémina allí presente.
Los malhechores, una vez cometido el hecho delictivo, huyeron a San Pedro Sula, pero las alertas movilizaron a equipos de la Policía Nacional Preventiva siendo localizados gracias a un GPS en la tercera avenida, entre la 1 y 2 calle. Los agentes de tribunales, con las pruebas recopiladas acreditaron la participación de los tres hombres en los hechos delictivos por los que fueron declarados culpables.
La coordinación de la Fiscalía Local de Choloma, también detalló sobre la condena de siete años de reclusión impuesta a Carlos Alberto Cerrato Rivera, por el delito de robo con violencia e intimidación en su grado de ejecución de tentativa y cuatro años por porte ilegal de arma de fuego de uso permitido, para un total de 11 años de cárcel.
A Elías Perdomo Benítez se le presentó acusación por otras agresiones sexuales; y se dictó auto de formal procesamiento a Alex Eduardo Ponce Barrera por tráfico ilícito de droga; a Jerson Bautista Cardona por porte ilegal de arma de fuego de uso permitido y a Kelvin Martínez Almendarez por homicidio imprudente en perjuicio de Ismael Bernárdez.
Brian Josué Argueta Gutiérrez, fue condenado a la pena de cuatro años de reclusión como responsable del delito de porte ilegal de arma de fuego de uso permitido.