WASHINGTON (EFE). El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, anunció que el hondureño Eswin Gabriel Mejía, acusado de homicidio, ha sido extraditado a Estados Unidos.
Según su comunicado, el presidente, Donald Trump, «nunca olvidó ni dejó de luchar por la justicia después de que Sarah Root fuera trágicamente asesinada en 2016 por un inmigrante ilegal que conducía bajo la influencia del alcohol y se convirtió en fugitivo de la justicia».
El supremo hondureño concedió la extradición de Mejía, acusado por Estados Unidos de los delitos de homicidio por vehículo motorizado y no comparecencia ante la j0usticia.
Está reclamado por el condado de Douglas (Nebraska), que lo acusa de conducir una camioneta «a exceso de velocidad y con signos de intoxicación alcohólica en el momento de golpear a una mujer, que posteriormente falleció en un hospital».
«Hoy, nueve años después del fallecimiento de Sarah la noche de su graduación universitaria, sus padres sabrán que su incansable lucha no fue en vano», dijo el jefe de la diplomacia estadounidense en su nota.
Rubio agradeció al Gobierno hondureño su colaboración y consideró que la rendición de cuentas bajo la administración de Trump ha prevalecido con esta extradición para que Mejía, al que no cita por su nombre, pueda comparecer ante la justicia.
En un mensaje publicado en la red social X, el senador Marco Rubio anunció la extradición desde Honduras a Estados Unidos del responsable del asesinato de Sarah Root, un caso que ha generado gran conmoción y exigencias de justicia durante los últimos nueve años.
“Finalmente, se hará justicia para Sarah Root”, declaró Rubio. “Hace nueve años, Sarah fue trágicamente asesinada por un inmigrante ilegal que luego huyó de nuestro país. Hoy, la administración Trump anuncia la extradición del asesino de Sarah desde Honduras a los Estados Unidos para que enfrente la justicia de una vez por todas. Gracias al gobierno de Honduras por su cooperación y asistencia”.
El caso de Sarah Root se remonta a 2016, cuando la joven fue víctima fatal de un conductor ebrio que se encontraba ilegalmente en el país. La fuga del responsable generó indignación y fuertes reclamos por parte de la familia de la víctima y de diversos sectores de la sociedad estadounidense.
La extradición del acusado marca un paso crucial en la búsqueda de justicia para Sarah Root. El gobierno de Honduras ha desempeñado un papel fundamental en este proceso, colaborando estrechamente con las autoridades estadounidenses para hacer posible la entrega del individuo.