VICENTE ARAGUAS: nacido en Xuvia-Neda (Coruña, España) un 2 4 de setiembre cuando el sig lo XX , de puro convulso, se retorcía en su mitad. Doctor en Filología Inglesa (su tesis, “ El mundo poético de Bob Dylan” , explica a las claras el porqué de un Premio Nobel de Literatura), ha dedicado, sigue haciéndolo, como profesor de Poesía en el Colegio Logos (Las Rozas, Madrid), una vida entera a la docencia. Primaria, secundaria, universitaria. Novelista, dramaturgo, traductor, ensayista, periodista, a lo largo de medio centenar de libros y un sinfín de colaboraciones en prensa, Araguas es sobre todo poeta.
Su obra, en gallego y español, recogida en libros como “ Maneiras de querer” o “ El
deseo aislado” , se balancea entre la épica y la lírica, con ribetes surrealistas y desprendimiento tan erótico como cargado de un cierto humor. Vicente Araguas ha sido traducido al italiano por Sabrina Lembo, al portugués por Viale Moutinho y, recientemente, al checo por Klára Goldstein. Actualmente vive entre Majadahonda (Madrid), Xuvia-Neda y Olomouc (Moravia), con tendencia meridiana hacia este lugar, donde se hallan Herbert y Klára, causa y razón últimsas de este poeta autodefinido como vagabundo y bailarín del verso.
“ Libro en marcha”
LLUVIA DE AGOSTO
(Con Herbert Goldstein)
LLUVIA DE AGOSTO
La calle un punto
de cruz en medio de los grajos.
o bien llegar tan lejos
como el fulgor del mundo
estallando cuando se llora
orillando los ríos sagrados
en el centro de la piel
que se unifica.
LOST RIVER
Yo era un río perdido allí donde los ángeles
no saben ni contestan o tal vez se despistan
(la juventud, un trance, asunto melancólico
para no echar de menos sino en los arrebatos.)
Llegasteis los dos juntos, primero quien debía,
y después tú, muy tibio, al verano moravo,
tan lentamente esdrújulo, escalera en la niebla
cuando decido, gótico, ascender cada día.
Siempre probando siempre labios y catedrales,
los ojos que me miran, la sonrisa con lágrimas,
el café más amargo, acentos de alegría
para depositarte, muchachito subido
en mí: tu cocotero, nogal o chaquetón
por si vienen los fríos.
PAISAJE ANIMADO
Vienen los más alegres
cabalgando en los balancines
tan anclados, tan firmes,
tan caballitos de tíovivo.
Son la comedia humana
con maneras divinas
agitando las piernas
cuando suena la danza, cuando danzan
los más alegres;
alegremente gatos.
DÉCIMAH
Te miraba, tan pequeño,
un corazón pajarillo,
escasamente chiquillo
como extraido de un sueño.
Y eras celeste y mi dueño,
mar subido de mareas,
río fértil en tareas
de peces interminables
y los azules contables
en un mirar que gatea.
TAN AZUL LA MIRADA
O FLECHA DISUELTA EN EL CIELO
Hortensias Àaqueando los senderos
que llevan por las huertas
donde perdí la niñez .
El niño que quiso ser gallo,
el gorro encarnado
del j efe de la estación hoy pesadumbre.
Mi madrina pone posos
de café entre las semillas de hortensias
para que sean azules.
He venido a mirarme
en tus ojos garzos
como Àechas disueltas en el cielo.
ME PREGUNTAN LOS PIANOS si estás en casa o
acaso has salido hacia los parques donde los pavos reales
emiten sonidos de almas en pena. Pero solo porque quisieran ser tú o, al menos, tuyos. Más todavía porque luego te marchas y los pianos, dentaduras blancas y negras, te
esperan con idéntica esperanza a la que te manifiestan
quienes te vamos siguiendo. Con insistencia de lluvia en
los tejados, de los gatos gatunos, de la nieve inesperada
en abril. En abril, tan a la vuelta de la esquina como la
oración del fugitivo de todo lo que existía antes de que te
mostrases. O aparecieses a bordo de todos los pianos, de
todos los valses, de todas las mazurcas, de las canciones
con liebres libres y libros que devoras en un santiamén
mordedor, las piernas colgando de un puente levadizo. El
que se alza para que pasen los barcos que traen los pianos
que me preguntan si estás ya en la casa porque quieren
estar contigo donde la alegría. Don de la alegría, calambur
escondido en tu ropa de casa.
CINCO SOLEALBAS PARA HERBI
I
Es tu sonrisa agua clara,
si lloras, más agua aún;
un océano tu cara.
II
Contigo brilla el paseo
y sonríes aunque duermas
como diciendo; “nos veo”.
III
Valiente como un tapir
al mostrar el sentimento:
bravo al llorar y reír.
IV
Te quiero como a las Àores
bajo la lluvia de agosto;
tan húmedos sus colores.
V
Yo me enamoré de Klára
y te quise a ti enseguida
solo con verte la cara.