Tres mujeres fueron ultimadas, dos de ellas, con saña extrema en menos de 24 horas, en Tegucigalpa, San Pedro Sula y Danlí, El Paraíso en sucesos que encienden las alarmas de la población y de autoridades policiales por incremento de feminicidios en el país.
La tarde del martes, agentes de la Policía Nacional reportaron el hallazgo macabro de Jensy Yarely Garay (22) en el interior de sacos, tirados en una quebrada que cruza la populosa colonia Hato de Enmedio en Tegucigalpa.
En primera instancia, personal forense y agentes policiales desconocían la identidad de la víctima, porque su cuerpo ya estaba putrefacto.

Por tal situación, el cadáver fue ingresado a la morgue capitalina en calidad de desconocida. Sin embargo, ayer forenses mediante exámenes científicos y cotejamiento de huellas, más testimonios de parientes, confirmaron el nombre. Trascendió que la joven habría muerto hace varios días.
Garay presentaba signos de tortura, por lo que se presume que la mantuvieron cautiva y luego le propinaron heridas con arma blanca en su cabeza.
Supuestamente, hace unos 15 días había llegado a residir a esa zona del Hato de Enmedio, lugar desde donde fue privada de su libertad. Hasta ayer, las autoridades no habían revelado indicios de quiénes estarían detrás del violento crimen.

OTRA DESAPARECIDA
Ese mismo martes, fue descubierto el cadáver de Keyla Yamileth Cálix Pérez (20), tras ser reportada como desaparecida en Danlí, El Paraíso. Luego de 15 días de intensa búsqueda, Cálix Pérez, fue encontrada en estado de descomposición, en un solar baldío de Danlí.
Los familiares se trasladaron a la morgue de la capital para reclamar el cadáver. “Teníamos la esperanza de encontrarla viva”, dijo con evidente dolor e impotencia, su abuelo, Marcelino Cálix. Hasta ayer se desconocían también las causas por las cuales le quitaron la vida.
COLOMBIANA
Por su parte, la colombiana Margoth Milena Arenas fue encontrada sin vida dentro de un hotel en San Pedro Sula. Hasta ayer se desconocen los motivos de su muerte.
Se trata de una comerciante, de 54 años de edad, quien era originaria de Colombia y residente en la ciudad de San Pedro Sula.
Según el informe preliminar, el cuerpo sin vida fue descubierto por vecinos del lugar en el interior del hotel El Mirador. Tras el hallazgo, llamaron a las autoridades policiales, quienes se hicieron presentes para realizar las respectivas investigaciones del caso. (JGZ)