El dirigente opositor nicaragüense desnacionalizado Félix Maradiaga pidió este miércoles a los países de la región suspender a Nicaragua del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) hasta que en el país se recupere la democracia.
«Es urgente que el SICA y la comunidad internacional tomen una posición firme contra la dictadura sandinista, suspendiendo a Nicaragua hasta que recupere la democracia, para evitar que el país siga siendo un rehén de un régimen corrupto y sumiso a potencias extranjeras», propuso Maradiaga -quien fue excarcelado y expulsado hacia Estados Unidos por las autoridades nicaragüenses el 9 de febrero de 2023 junto a otras 221 personas- en un artículo divulgado en sus redes sociales.
La posición del dirigente opositor se da luego de que el Gobierno que preside Daniel Ortega junto a su esposa, Rosario Murillo, acusara a Costa Rica, Guatemala, Panamá y República Dominicana de inmiscuirse en sus asuntos internos, tras rechazar la candidatura del excanciller nicaragüense Denis Moncada como nuevo secretario general del SICA y se retirara de la Corte Centroamericana de Justicia (CCJ).
Al respecto, Maradiaga dijo que el retiro de Nicaragua de la CCJ «es una reacción impulsiva del régimen sandinista, que, al no lograr imponer a Denis Moncada como Secretario General del SICA, busca vengarse y chantajear políticamente».
«Este acto no refleja soberanía, sino un intento desordenado de desestabilización para presionar a los gobiernos centroamericanos que no se someten a su voluntad», señaló el opositor.
A juicio de Maradiaga, la salida de Nicaragua de la CCJ «confirma que Ortega y Murillo han entregado la soberanía de Nicaragua a China y Rusia a cambio de apoyo para su régimen autoritario».
«Ortega utiliza la integración regional solo cuando le conviene y la destruye cuando no puede controlarla», consideró el opositor nicaragüense desnacionalizado.
Nicaragua se retira de la CCJ, porque no la «controla»
Por su lado, el también dirigente opositor nicaragüense desnacionalizado Juan Sebastián Chamorro dijo que la salida de Nicaragua de la CCJ es «una muestra de frustración de la dictadura al no poder controlarla».
Chamorro explicó que el Gobierno sandinista había pedido a la CCJ que fallara e impusiera al excanciller Moncada como nuevo secretario general del SICA y al no lograrlo se retiró de ese órgano de justicia.
La CCJ, integrada ahora solo por El Salvador y Honduras, como una «institución moribunda, sin ningún poder decisorio y sin ninguna capacidad vinculante en su sentencia, no podía hacerle milagros a la dictadura», afirmó el opositor.
«Cuando ellos se dan cuenta que el procedimiento no es el que desean, sino que toma bastante tiempo, que tienen que ir al Consejo Centroamericano y del Caribe y organismos judiciales, ver todo ese proceso y complicaciones, deciden retirarse de la Corte Centroamericana de Justicia», argumentó Chamorro.
Según el también opositor desnacionalizado, «esto es un patrón que estamos viendo» con el Gobierno de Nicaragua, «que cuando no se obedece a los designios de la dictadura, entonces se salen de la organización».
La Secretaría General del SICA se encuentra acéfala desde que a mediados de noviembre de 2023 el abogado nicaragüense Werner Vargas renunciara al cargo para el periodo 2022-2026 y para el que fue propuesto por Nicaragua.
El SICA, creado en Tegucigalpa en 1991, lo integran Belice, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá y República Dominicana como miembros de pleno derecho, mientras que México, Estados Unidos y otros países tienen la categoría de observadores regionales. efe