“Ningún gobierno debería verse obligado a elegir entre pagar su deuda o proteger vidas humanas”, señaló el titular de la Secretaría de Finanzas (Sefin), Christian Duarte, invitado como orador
principal en la apertura de la 14va Sesión Internacional sobre manejo sostenible de la deuda pública, en la Sede de Naciones Unidas en Ginebra, Suiza.
En su discurso, Duarte, hizo énfasis en las consecuencias devastadoras del modo de producción y consumo sobre el ecosistema y los niveles crecientes del calentamiento global, y cómo esto se traduce en catástrofes climáticas y sociales cada vez más frecuentes que colocan grandes presiones fiscales sobre los países pobres, teniendo que recurrir a la deuda pública para financiar la respuesta gubernamental.
El ministro Duarte realizó su discurso de apertura junto a la Secretaría General de Comercio y Desarrollo de la ONU, Rebeca Grynspan, la primera ministra de Barbados y los ministros de Finanzas de Madagascar y Camboya.
De igual forma, participaron en la sesión reconocidos expertos
de todo el mundo, así como los delegados de los países integrantes del Sistema de Naciones Unidas y representantes de organismos financieros multilaterales.
El ministro Duarte cuestionó los avances de la cooperación financiera internacional, cuando informes de OXFAM indican que el 1% más rico del mundo posee más riqueza que el 95% restante del planeta.
“Lo que se perdona en impuestos con mayor frecuencia a los más ricos, por un lado, se debe pedir prestado a los mercados de valores por el otro”, señaló Duarte.
SERVICIO DE DEUDA
Citó un reporte recientemente presentado ante la Asamblea de la ONU por la Experta Independiente, Attiya Waris, que establece que “desde el año 2008 a la fecha, la deuda pública de los mercados emergentes y en desarrollo se ha más que duplicado, y para el año 2022, se estima que los pagos por servicio de deuda de los países en desarrollo alcanzaron la suma de 443 mil millones de dólares”.
“En Honduras, entre 2009 y 2022 se han perdonado en impuestos más de 20,000 millones de dólares, suficientes para haber pagado la totalidad deuda pública al cierre del año 2023”.
“Anualmente, Honduras perdona más del 7% de su PIB en privilegios fiscales a los más ricos, pero al mismo tiempo debe financiar un 30% del presupuesto con deuda pública”.
“Para corregir esto, el gobierno ha planteado la Ley de Justicia Tributaria, cuyo objetivo es reducir los excesivos y discrecionales privilegios fiscales que gozan en mayor medida los más ricos del país”.
“Junto con este esfuerzo, se promueve el programa de inversiones públicas más grande en la historia del país, reconocido por organismos internacionales por su ambiciosa agenda y la implementación exitosa de programas de seguridad alimentaria, protección ambiental y acceso a la educación”.
Finalmente, Christian Duarte recalcó que “no se debe penalizar el acceso a financiamiento de los países con base en motivos políticos o ideológicos” ya que “es un grave peligro para el núcleo mismo de la cooperación internacional” y “representa la posibilidad real de que miles de personas logren acceder o no a recursos que podrían determinar su supervivencia”.
Honduras reconoció la importante labor de investigación, asistencia técnica y fomento de capacidades llevadas a cabo por ONU Comercio y Desarrollo, principalmente en beneficio de los países en vías de desarrollo. Igualmente, renovó el compromiso del país con la transformación del modelo de desarrollo económico y el fortalecimiento del multilateralismo, la cooperación y la solidaridad internacional como guía para trazar un futuro de equidad y justicia.