La Comisión Nacional Electoral del Partido Nacional de Honduras, ante los acontecimientos en las elecciones primarias e internas, denunció que “existió un intento deliberado de boicot a las elecciones.
En un comunicado, destacan: Las evidencias recabadas y el análisis de los hechos confirman que existió un intento deliberado y orquestado de boicotear las elecciones primarias e internas del pasado domingo.
Esta maniobra tenía como objetivo desprestigiar el proceso, debilitar la institucionalidad del Consejo Nacional Electoral (CNE) desde sus cimientos y generar un ambiente de incertidumbre de cara a las elecciones generales del 30 de noviembre.
El plan de desestabilización se ejecutó a través de múltiples acciones coordinadas para entorpecer el proceso e impedir el ejercicio del sufragio. Entre las irregularidades documentadas destacamos:
En la madrugada del día electoral se detectó que decenas de baterías de los dispositivos biométricos fueron extraídas de sus estuches de envío, buscando su inutilización.
El personal responsable de entregar la planificación de rutas al CNE se negó a hacerlo en tiempo y forma.
Pese a la insistencia del CNE, el inicio de la distribución de maletas electorales fue deliberadamente retrasado, con unidades de transporte permaneciendo estacionadas en diferentes puntos de la capital sin justificación. Al ser consultados, los conductores afirmaron haber recibido órdenes de no movilizarse.
Al requerir la localización de los buses retenidos con material electoral y ordenar su escolta para garantizar su llegada a los centros de votación, la respuesta de las Fuerzas Armadas fue dilatoria y confusa.
La entrega de material electoral a los centros de votación que finalmente lograron recibirlo en horas de la noche solo fue posible gracias a la intervención directa de las consejeras en el Centro Logístico Electoral, quienes, junto al personal civil del CNE, reorganizaron, verificaron y enviaron las maletas en vehículos institucionales.