El 16 de enero del 2025, la Embajada de los Estados Unidos en Honduras celebró la inauguración de su nueva sede en Tegucigalpa con un simbólico corte de cinta. La ceremonia estuvo liderada por la embajadora de Estados Unidos ante Honduras, Laura Dogu, quien destacó la importancia de este proyecto como un paso significativo en la relación bilateral entre ambos países.
Explicó la celebración de la independencia de los Estados Unidos y la inauguracion de su sede diplomática, se trasladó a enero en vez de julio, debido a las intensas lluvias durante la última celebracion el día de la Independencia, decidieron pasarlo a enero, con la esperanza de contar con un clima más favorable.
“Al comenzar el 2025 también es un tiempo para celebrar lo nuevo, un año nuevo y un edificio nuevo, y la proxima semana, una administracion nueva en los Estados Unidos. Mientras reflexionaba sobre el nuevo año y nuestra próxima mudanza a este impresionante edificio demuestra nuestro compromiso de fortalecer nuestros vínculos”, manifestó la diplomática.
El edificio muestra elementos de ambas culturas y la vista hacia los cerros de la capital, la fusión de culturas hondureñas muestran la presencia del país. “Estoy muy orgullosa de este edificio”, manifestó.
Aunque la inauguración oficial ya se llevó a cabo, el traslado completo a las nuevas instalaciones se realizará en los próximos meses, en una fecha aún por confirmar.
La nueva embajada se caracteriza por ser un complejo moderno, seguro y sostenible, diseñado para ofrecer un entorno acogedor tanto para los visitantes como para el personal diplomático.
Este proyecto, concebido por SHoP Architects en colaboración con la firma local Jorge Caballero Arquitectos, fue ejecutado por la empresa constructora B.L. HarbertInternational.
Según las autoridades, la construcción generó más de 1,000 empleos para hondureños y contribuyó con más de 42 millones de dólares a la economía local.
Uno de los aspectos más destacados de la nueva embajada es su enfoque en la sostenibilidad.
El diseño busca obtener la certificación en Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental (LEED®), lo que refleja el compromiso del gobierno estadounidense con el medio ambiente. Entre sus características sostenibles se encuentran paneles solares, sistemas de recolección y reutilización de agua lluvia, y materiales ecoamigables.
El diseño arquitectónico también rinde homenaje a la riqueza cultural y natural de Honduras. Inspirado en el terreno de Tegucigalpa y utilizando materiales locales, el proyecto incorpora elementos representativos de la diversidad del país, como bosques, sabanas y playas. Además, el sitio preserva el centenario árbol de Guanacaste, un símbolo del patrimonio hondureño, y maximiza las vistas hacia las montañas circundantes.
La embajada representa una optimización en el rendimiento energético y un avance en infraestructura diplomática, asegurando espacios más modernos y funcionales para gestionar los vínculos entre ambos países.
Con esta nueva sede, se espera fortalecer aún más la cooperación en áreas como seguridad, comercio y desarrollo sostenible.
La ceremonia de inauguración marca un nuevo capítulo en la relación entre Honduras y Estados Unidos, subrayando el compromiso de ambas naciones de trabajar juntas por un futuro próspero y sostenible.
A este acto oficial están invitados autoridades de gobierno, sector privado, organizaciones y medios de comunicación.
El corte de cinta lo hicieron la embajadora Dogu y el designado presidencial, Renato Florentino, entre otras autoridades. Asimismo, se le vio al hijo de la Presidenta de la República, José Manuel Zelaya Castro, la presidenta de la Corte Suprema de Justicia, Rebeca Ráquel, empresarios y otros.