Los aztecas y mayas usaban este sistema para la agricultura observando el sol, la luna, estrellas y nubes.
Autor: Luis Alonso Gómez Oyuela
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Este año las cabañuelas han sido más notorias que en años anteriores. Según una breve descripción de Wikipedia, las cabañuelas son un conjunto de métodos tradicionales de predicción meteorológica a largo plazo sin base científica utilizados en el centro y sur de España y en América. Las cabañuelas es uno de los sistemas de predicción climática más antiguos. Para el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), las cabañuelas son un método que usaban los aztecas y que también fue adoptado por los mayas.
Andrea Hernández, investigadora mexica, publica en el Excélsior de México una breve descripción con la pregunta que muchos nos hacemos, especialmente en esta época cuando el periodo de frío y lluvias se ha prologando después de los primeros seis o siete días del mes de enero. La periodista Hernández, en su escrito señala lo siguiente: “las cabañuelas son una tradición popular, especialmente arraigada en México, España y América y otros países de origen hispano, incluyendo Honduras. Cuyo objetivo es predecir el clima de todo el año basándose en los primeros seis días de enero.
Cabe mencionar que la práctica tiene raíces antiguas, vinculadas a culturas agrícolas, donde era crucial anticipar el clima para planificar la siembra y cosecha. A grandes rasgos, las cabañuelas son un conjunto de métodos tradicionales para predicción meteorológica. Aunque también pueden ser las lluvias ligeras que se presentan durante los primeros meses del año. Pero de acuerdo con la primera definición, empiezan en los primeros días de enero de la manera siguiente.
Días de enero: los primeros 12 días de enero representan los 12 meses del año en orden. Por ejemplo, el 1 de enero predice el clima de enero, el 2 de enero el de febrero, y así sucesivamente hasta el 12 de enero. Los siguientes 12 días (del 13 al 24 de enero) se interpretan de la manera inversa, es decir, el 13 corresponde a diciembre, el 14 a noviembre, y así sucesivamente hasta regresar a enero.
Los días complementarios: del 25 al 30 de enero, se analiza el clima en bloques de dos horas por cada día, para afinar detalles en la predicción mensual. El 31 de enero suele ser un día especial para interpretar las tendencias generales del año. De este modo, se observan las condiciones climáticas (lluvia, viento, frío, calor) de cada día y se relacionan con el mes correspondiente. Por ejemplo, en la ciudad de México se reportaron lluvias ligeras, igual condición se ha observado en el país desde los últimos días de diciembre. Esto significa, y según la tradición que en marzo habrá lluvia.
Algunas personas recurren a la observación de la forma de las nubes, la dirección del viento, características del sol y de la luna, las estrellas, la niebla, el rocío de la mañana, el arcoíris o el granizo, entre otros que puedan ayudar a pronosticar el clima a lo largo del año. La tradición indica que continúan siendo válidas las cabañuelas.
Aunque las cabañuelas son una tradición interesante y folclórica, no tiene base científica para predecir el clima, ya que, en la actualidad, los servicios meteorológicos utilizan tecnología y modelos matemáticos mucho más precisos. Sin embargo, la práctica de las cabañuelas persiste como una costumbre que mezcla observación, experiencia y creencias populares, por lo que, si una persona quiere seguir este método, es completamente válido, aunque podría tener fallas.
En Honduras las cabañuelas son datos interesantes del clima sobre una práctica meteorológica, es una tradición milenaria de cómo predecir el clima. Es una antigua práctica de los campesinos nuestros, un método muy efectivo para predecir el año. Según la historia, este método de las cabañuelas surgió de “la fiesta de las suertes o la fiesta de los tabernáculos. Los hombres del campo observan los cambios climáticos en los primeros 12 días del mes de enero para poder adelantar el pronóstico de los próximos 12 meses”.
Eso quiere decir que, si el 8vo día de enero es lluvioso, eso significa que agosto será lluvioso. También se pueden pronosticar los fenómenos naturales, si ocurre alguna anomalía en esos primeros 12 días del año. Es así como los campesinos realizan análisis para poder saber en qué mes sembrar o realizar cualquier tipo de actividad de agricultura. De esta forma es como pueden sembrar en los meses de sol y obtener una buena cosecha para inicio de los meses de lluvia.
Pero, ¿qué dice nuestra gente en el campo? Es parte de la tradición oral transmitida de generación tras generación. Para la gente del campo los pronosticadores con toda la tecnología disponible no superan nuestras creencias. “Nosotros con solo ver el sol y las nubes sabemos que lloverá, aprendimos a sembrar en “seco”, costumbre sureña; sembrar los últimos días de abril y esperar las primeras lluvias de mayo. Si las nubes corren de norte a sur, no habrá lluvia, si corren de sur a norte lloverá.
Entre nuestra gente de tierra adentro y de acuerdo con la historia la creencia del origen de las cabañuelas se originó debido a una antigua celebración religiosa judía y sigue como una fuente confiable para agricultores y personas del campo en Honduras que saben bien qué son, cuándo empiezan y cómo es que con este método predicen el clima. Las cabañuelas como tal, son un método tradicional de predicción meteorológica a largo plazo sin base científica, sin embargo, son tan reales que superan la creencia en un Santa Claus o los Tres Reyes Magos.
(Fuente: https://www.hondurasmagazineusa.com)
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