Atendiendo una gentil invitación que nos hicieron los miembros de la familia Reyes Paz, junto a mi esposa Gladys y los queridísimos parientes Guillermo y Berti, fuimos a conocer
recién el magnífico complejo urbanístico llamado Green Hill, que aquellos dilectos amigos siguen construyendo en el barrio de El Jilote, en una zona conocida como “el piquito”, en una cumbre de la ciudad de Santa Bárbara.
Quedamos francamente sorprendidos por el estilo moderno de las regias residencias en donde viven estos emprendedores y futuristas hermanos, más otras que han mandado hacer varios particulares que han comprado y ya viven allí, y otras tantas en proceso de construcción. En realidad, nada que envidiar a la elegancia de las casas que encontramos en otras zonas residenciales de las grandes urbes del país.
Destacan en esta urbanización, un control estricto en el protocolo de entrada, sus calles pavimentadas, los servicios públicos, el área social para sus vecinos, con piscina incluida, una canchita de fútbol sobre un engramado bien cuidado, y que se ilumina si se requiere, al ponerse el sol, y no menos espectacular, sus veredas finamente empedradas, más una glorieta y un mirador de fantasía donde se aprecia en toda su dimensión la ciudad, sus barrios aledaños, así como algunos municipios colindantes. Especialmente, en horas de la noche es una gozada ver las luces encendidas, y el ir y venir de los automóviles recorriendo sus calles principales, como si fuese un nacimiento navideño permanente.
El clima desde luego muy fresco, por su considerable altura, rodeado de agrestes montañas y cerros. Destacándose entre éstos el Guatemalía, de origen volcánico, considerado el fiel guardián de Santa Bárbara y el segundo cerro más alto de nuestro país. Posee numerosas cuevas como la del Caracol, la Campana, y la Cueva del Duende. Desde
Green Hill, también se aprecian las ruinas del Castillo Bográn, uno de los importantes monumentos históricos de Honduras, con estructura colonial. Su edificación que data del siglo XIX, era utilizada como casa de campo por parte del entonces presidente Luis Bográn. Está localizado en la zona de amortiguamiento del Parque Nacional Montaña de Santa Bárbara.
Así mismo existe en el centro neurálgico del complejo Green Hill, un bar, llamado sugestivamente “atukum” (expresión que, en el lenguaje coloquial criollo, significa beber un líquido de un solo trago) que tiene dos plantas. En la segunda, se puede apreciar otro ángulo de la ciudad santabarbarense. En este mismo sector, Pedro, tiene un consultorio médico, su propia área social y varias cabañas que se alquilan a turistas bajo el sistema del airbnb. Mientras tanto, Santiago (dueño del bar), posee un despacho legal, más una tienda de antigüedades.
Sin duda, Green Hill, ha venido a darle valor agregado a esta pujante ciudad, llena de mucha historia colonial, y hoy en día poseedora de una importante actividad comercial, que incluye la economía informal, televisoras, radios, farmacias, instituciones bancarias y hoteles; más la existencia de centros educativos de educación superior como la Universidad UTH, y otras fuentes del conocimiento, como la Casa de la Cultura, que para la honra de mi familia Leiva Leiva, lleva el nombre de nuestro fallecido progenitor: “Dr. José María Leiva Vivas”.