Las innovaciones de la biotecnología están cambiando de manera revolucionaria la forma en que se aborda en las Américas el doble desafío de producir alimentos para el mundo y preservar los recursos naturales.
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP29) fue testigo de esta realidad, gracias a un evento realizado en el pabellón que el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) instaló en Bakú, Azerbaiyán, junto a sus socios del sector privado y público.
La conversación fue liderada por BIO (Biotechnology Innovation Organization), la entidad más importante del mundo en la representación de la industria biotecnológica, fundada en 1993 en Estados Unidos.
Participaron Eduardo Leao, Presidente y CEO de Croplife Brasil; Tamara Muruetagoiena, Vicepresidenta de Sostenibilidad de la Asociación Internacional de Productos Frescos; y Jamaica Gayle, Directora Senior de Sostenibilidad y Asuntos Ambientales de la Corn Refiners Association.
Moderó el debate Rose Bartuto, Asesora Senior de Política de Farm Journal Foundation. Lloyd Day, Subdirector General del IICA, pronunció las palabras de apertura.
Favorecer la seguridad alimentaria
El evento mostró, en el mayor foro ambiental del mundo, cómo la biotecnología está creando sinergias en el recorrido de las cadenas de valor para favorecer la seguridad alimentaria.
A través de materias primas mejoradas, la reducción del uso de insumos y el empleo de semillas resistentes, las soluciones biotecnológicas están mostrando su capacidad, según los resultados que se mostraron en la Casa de la Agricultura Sostenible de las Américas, denominación que tiene el pabellón del IICA desde su primera presencia en el foro climático, hace dos años en la COP27 de Egipto.
Eduardo Leao explicó que Croplife Brasil, es parte de una organización mundial cuya misión es apoyar la innovación en agricultura. Contó que representa organizaciones tecnológicas, con el objetivo de buscar sinergias que permitan, por ejemplo, reducir el uso de agroquímicos.
“No tenemos más espacio para una sola solución para situaciones complejas. Necesitamos diferentes soluciones que consideren las diferentes circunstancias productivas, sociales y ambientales en las regiones y en los países”, dijo Leao.
Leao contó que Coplee Brasil tiene un vínculo estrecho con la Empresa Brasileña de Investigación Agrícola (EMBRAPA), que ha permitido desarrollar nuevos productos biotecnológicos con gran éxito.