Desde una prisión de alta seguridad en Florida, Estados Unidos (EEUU), el hondureño Geovanny Fuentes Ramírez argumenta negligencia de su defensa y errores constitucionales en su caso por narcotráfico, por lo que pide anular fallo condenatorio suscitado en 2022 y la realización de un nuevo juicio.
Fuentes Ramírez, sentenciado a cadena perpetua más 30 años por narcotráfico, presentó una moción ante la Corte del Distrito Sur de Nueva York, buscando anular el fallo por el que guarda prisión en en la penitenciaría USP Coleman I en Florida, hogar de más de 1,300 prisioneros de diferentes nacionalidades.
Fuentes Ramírez argumenta que se violaron sus derechos constitucionales, entre sus reclamos, destaca la falta de una defensa adecuada, alegando que su abogado, Avraham Moskowitz, «no exploró alternativas cruciales» para su caso.
“Mi historia habría sido diferente si mi abogado hubiera cumplido con su deber”, asegura.
Geovanny Fuentes Ramírez solicitó a las autoridades estadounidenses que se le asigne un nuevo abogado, asegurando que no cuenta con recursos para pagar su defensa y que enfrenta barreras lingüísticas al no hablar inglés.
El hondureño, aspira a que la Corte del Distrito Sur le otorgue un nuevo juicio, argumentando que su condena actual no solo es desproporcionada, sino injusta.
Fuentes Ramírez, ahora de 54 años de edad, detenido en 2020 en Miami, fue hallado culpable en por un jurado en marzo de 2021 en la Corte de Nueva York y fue sentenciado por el juez Kevin Castel un año más tarde.
l gobierno estadounidense considera a Fuentes socio del expresidente hondureño, Juan Orlando Hernández, quien en junio de este año fue sentenciado a 45 años de prisión por conspirar para actividades del narcotráfico.