LA CEIBA. Una tan sola semana después del destructor paso de la tormenta tropical Sara, un frente frío proveniente del golfo de México, puso nuevamente de rodillas a esta ciudad, con apenas tres horas de torrenciales aguaceros.
El nivel de saturación del suelo provocó las prontas inundaciones que atestaron colonias enteras e hicieron intransitables algunas de las vías principales de comunicación dentro de la ciudad.
El sector sur es uno de los más perjudicados ya que la mayoría de los habitantes viven en cerros de arcilla y eso genera que los peligros por deslizamientos sean evidentes y las corrientes de agua se precipiten sin encontrar ninguna barrera natural que les impida.
Las colonias San José y la Canelas fueron un vivo ejemplo de estos ya que el agua sobrepasó las calles y terminó por ingresar nuevamente en las casas de habitación de algunas familias que ya habían sido afectadas la semana anterior.
Por su parte, la Quebrada de Adán volvió a hacer de las suyas acarreando cualquier cantidad de basura y metiéndola en las casas de la colonia Suyapa y terminó saliéndose a la carretera CA-13 por aproximadamente un kilómetro, terminó rebasando además uno de sus puentes en el barrio Mejía.
Nunca faltaron los conductores imprudentes que trataron de desafiar a la naturaleza metiéndose por calles que se inundaron más de lo acostumbrado y que terminaron varados en medio de las mismas buscando auxilio de automotores más altos y fuertes.
En otro caso, los empleados de un supermercado ubicado al final de la avenida San Isidro vivieron minutos de apremio al tratar de achicar toda el agua que se metió al inmueble por la parte de arriba causando daños en algunas mercaderías.