La Corte Primera de Apelaciones de La Ceiba, Atlántida, por unanimidad de votos, resolvió revocar el sobreseimiento definitivo por conducción temeraria y las medidas distintas a la prisión preventiva, dictadas en audiencia inicial al militar de la Fuerza Naval, José Virgilio Salinas Sánchez, acusado además de los delitos de homicidio imprudente grave y omisión del deber al socorro en perjuicio de las hermanas: Delmi Maribel Canales López y María Antonia Méndez López.
El tribunal de alzada declaró con lugar dos recursos de apelación solicitados por la fiscalía local.
En consecuencia, se amplía el auto de formal procesamiento dejando activo nuevamente el delito de conducción temeraria; asimismo, se impone la medida cautelar de prisión preventiva.
En la audiencia inicial desarrollada el pasado 10 de julio, a Salinas Sánchez se le aplicaron las medidas cautelares de arresto domiciliario, una fianza de 50 mil lempiras ofrecida por la defensa y la prohibición de salir del país.
Con la resolución emitida por la Corte Primera de Apelaciones las medidas cautelares quedan suspendidas y se impone la medida de prisión preventiva que deberá cumplir en un centro penitenciario para garantizar su presencia en el desarrollo del juicio.
Asimismo, se determinó dejar sin lugar la fianza ofertada.
El percance por el cual el miembro castrense está siendo acusado ocurrió la madrugada del sábado 6 de julio en la calle 13 del barrio El Imán, de La Ceiba.
Las ahora occisas se conducían en una motocicleta y se dirigían a su vivienda tras salir de laborar en un puesto de baleadas.
Precisamente cuando las fallecidas iban frente al hospital Medicentro, el miembro de la Naval venía en sentido contrario en un carro tipo turismo bajo los efectos del alcohol, según constató la prueba de alcoholemia que se le practicó, específicamente el resultado del examen de alcoholemia reveló que presentaba un 72mg/ de 100 ml de alcohol en su sistema.
En ese momento conducía a alta velocidad e invadió el carril de las hermanas López y las embistió de frente.
Luego del accidente, el militar de la Naval huyó y dejó su carro abandonado con severos daños, horas después del accidente fue capturado por agentes de la Policía Nacional.
En el lugar del accidente quedó muerta Delmi Méndez, mientras que su hermana María Antonia fue llevada en la ambulancia bomberil al Hospital Atlántida, donde falleció horas después.
Por el delito de homicidio imprudente grave el Código Penal vigente en Honduras señala una pena de 3 a 7 años de cárcel, por el delito de omisión del deber al socorro agravado una pena de 12 a 20 meses de privación de libertad y por el delito de conducción temeraria un castigo de seis meses a tres años de prisión y la privación del derecho de conducción de vehículos automotores por un tiempo de uno hasta seis años. (XM)