Estas palabras dichas por un jerarca militar cayeron como un trueno en aquellas personas que aún llevan en su sangre el ADN del general Carías, que consiste en tener el poder de la nación como “botín de guerra”, para robar en discreción, aterrorizar al pueblo, encarcelarlo, desterrarlo o enterrarlo.
Pero al fin las Fuerzas Armadas se han dado cuenta que después de tantos golpes de Estado, ellos han sido útiles a un partido político que ha sido el mismo de siempre, pero el gran cambio se debe a que actualmente las Fuerzas Armadas en todos sus mandos de oficiales académicos, egresados de la Academia Militar y de universidades, y como tal ellos están preparados para opinar de política y economía de nuestro país, eso del comunismo ya no les asusta, porque saben más de esos que gritan en las calles o llenan los programas de radio o televisión, intrigando, moviendo grupos, vociferando como cualquier termocéfalo, utilizando a pobres masas humanas para lograr lo que se proponen; lo peor de este asunto es que son los mismos que ayer usaron al Estado para cometer delitos contra la patria y destruir sus sagrados principios del civismo, moralidad, su educación y toda su estructura jurídica.
Esa cocora del comunismo ya no se la creen ni en su propia China de Mao, ahora tiene un movimiento comercial con todo el mundo de más de $9,000 billones al año.
Sólo en cerebros turbados con el síndrome de Hubris o las cabezas calientes que cualquier brutada que se les ocurre la vociferan a todo viento.
Llaman a este gobierno de “Libre” comunista y su turbada mente no entiende que, si fuera así, los delincuentes de la Caja de Pandora, Planeta Verde, ladrones del Seguro Social, las casas contenedores, los hospitales chatarra y otros por igual, ya estarían pasados por las armas en la Plaza Central.
El editorial de LA TRIBUNA del 11 sept. 2024 y el artículo del Dr. Marco Tulio Medina del 10 de octubre del 2024, sobre el síndrome de Hubris, me recordaron lo que un extranjero amigo me dijo: el 70% de los hondureños nacen tarados y de ese porcentaje surgen los políticos. La oposición no ha entendido que esa doctrina comunista es cosa del pasado, porque sus líderes ya murieron: Carlos Mark, Lenin, Stalin, Trotsky, Mao Tse Tung, también se desintegró la Rusia soviética, en América Latina murió Fidel Castro, el Che Guevara, Lombardo Toledano, Allende, Hugo Chávez, etc. En Honduras murió Ramón Amaya Amador, Figueroa Rush, Longino Becerra, Mario Membreño y otros que se me escapan.
A Xiomara mi presidente le recuerdo todo poder en la Tierra viene de Dios, usted siga el camino que se ha trazado en su gobierno para bien de Honduras y su pueblo, así la historia recogerá su obra bienhechora.
José Horacio Guzmán
Tegucigalpa, M.D.C.