La Selección de Honduras requería una buena cancha para recibir a México el próximo 15 de noviembre por los cuartos de final de la Nations League Concacaf, pero el estadio Olímpico, sede de las eliminatorias desde Japón y Corea 2001 hasta Catar 2022 por primera vez, no estaba disponible.
El estadio más grande de Honduras está casi en el abandono, ya sea su estructura como el engramillado, por lo que ni equipos de Liga Mayor participan allí, convirtiéndose en sitio ideal para conciertos de grupos musicales y cantantes que hacen gorras por la región.
La ilusión de los sampedranos en el lejano 1996 era tener el estadio más moderno y grande del país, de hecho su primer partido oficial de Liga fue el clásico nacional entre Marathón y Olimpia el 1 de marzo de 1998, pero todo ha cambiado poco a poco y hoy ya no es opción real para la selección ni equipos.
Durante las mejoras del Estadio Morazán, el Olímpico fue la casa de Real España y en algunos juegos de Marathón, además del Lone de Liga de Ascenso, pero con su estado actual ya no podrá programar hasta que las autoridades se preocupen y lo saquen del abandono.
Lo increíble y según investigaciones de Diario Más, el aproximado de alquiler para conciertos es de 80 mil dólares por evento, por lo que la gran pregunta es por qué no se invierte en la misma instalación deportiva.
El partido ante México por razones de aforo y comodidad debió jugarse en el Olímpico, pero el entrenador colombiano, Reinaldo Rueda, se quejó del mal estado de la cancha, por lo que es vital y fundamental para 2025 que los administradores del estadio se pongan las pilas e inviertan en mejorar la instalación deportiva más grande y bella del país. (GG)