*** Hemos pasado diez meses y tres días preguntándonos quién será la persona que salga electa presienta de EE.UU. al comienzo de este año 2024 ya estábamos viendo que Joe Biden buscaría su reelección y que Trump estaría buscando volver a ocupar al Casa Blanca tal como sucedió, Donald Trump tenía amarrada su nominación presidencial, pero Joe Biden tuvo una noche triste cuando en un debate presidencial con Trump, el actual gobernante tuvo 10 minutos que desgarraron su pretensiones de reelegirse porque demostró al pueblo de EE.UU. que por su edad que ya era mayor los 80 años su cerebro estaba teniendo fallas después de 10 minutos de quedar malparado volvió a andar bien, pero ya era tarde. Esos 10 minutos pusieron fin a su esperanza de seguir gobernando desde la Casa Blanca. Un par de meses después se vio obligado a renunciar a su candidatura y dejar que fuera su vicepresidente, Kamala Harris, quien obtuvo ese puesto eleccionario. Mientras Trump llevaba casi cuatro años haciendo campaña, Kamala solo ha tenido 90 días para buscar vencer a Trump. Dentro de 24 horas comenzará la votación a nivel nacional en la que se determinará si fueron los cuatro años de campaña de Trump que se llevarán en trofeo presidencial o tres meses que es todo el tiempo que ha tenido la vicepresidenta Harris para obtener la presidencia.
*** Números van y vienen en las encuestas. Todavía hoy en día en víspera de la elección se sigue hablando de un empate entre los dos contrincantes, pero en las últimas horas parecería que una campaña fuertísima de los millonarios que dan dinero a las campañas están reforzando a Trump cuyos viajes a diestra y siniestra a lo largo del país y de los siete estados vitales podrían inclinar la decisión de los votantes a favor de Trump. Pero sostengo la tesis que en política no hay nada escrito y puede haber sorpresas inesperadas.
*** Recordemos algo sumamente importante que alguien puede ganar el voto popular, pero perder el voto electoral y eso puede ser el resultado final. Se necesitan 270 votos que sería un empate y en caso de empate la persona que tienen que votar es nada menos que el vicepresidente de EE.UU. que en este caso sería Kamala Harris. Esto sería algo jamás visto en la vida democrática de EEUU. Hay que recordar que en la elección del 2020, Trump le exigió a su vicepresidente Mike Pence que se las arreglara para que él votara a favor de Trump. Que se hicieran artimañas en cuanto a total electoral y que dijera que el ganador era Trump, cosa que él sabía que estaría violando la constitución y por eso no le dio a Trump lo que le exigía. A final de cuentas Biden obtuvo un poco más de 300 votos electorales y Trump apenas 230. De entonces a la fecha, Trump ha estado diciendo que le robaron las elecciones cosa que no es cierta.
*** Me voy a armar de sándwich, hamburguesas, tener suficiente café y pasar la noche entera oyendo y viendo cómo va el conteo, pero con los ojos fijos no en el voto popular, sino en el voto electoral. Creo que tomará un buen rato hasta que sepamos quién será la persona que será juramentada como presidente de los EEUU el 20 de enero del 2025.