Equipos especializados de la División de Seguridad del Transporte Urbano (DSTU), iniciaron ayer una nueva estrategia para resguardar el servicio del transporte público en Tegucigalpa y Comayagüela.
“Este esfuerzo busca restablecer el orden y garantizar la seguridad tanto de los usuarios como de los empleados del sector”, adelantó el comandante de la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (Dipampco), Mario Molina Moncada.
“La transformación del transporte público es un objetivo clave que beneficiará a toda la ciudadanía”, agregó.

La prueba piloto inició en la terminal de buses de Tiloarque, con seguridad a rutas que operan en este punto estratégico, específicamente, autobuses que circulan por el bulevar Fuerzas Armadas.
Entre las medidas previstas está la certificación de conductores y el establecimiento de un control riguroso, además de señalización de paradas de abordaje y desabordaje.
Según Molina Moncada, se implementarán estrategias de seguridad que facilitarán el monitoreo de las rutas, mejorando así la movilización de los usuarios.

Un sistema de vigilancia instalado por los dueños de las unidades y consorcio de estas rutas del transporte urbano, facilitará la seguridad a empleados y usuarios que utilizan las unidades de transporte.
Este proyecto cuenta con el respaldo del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT), el Sistema Nacional de Emergencias 9-1-1, la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC), la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) y, por supuesto, la Dipampco, especificó el comisionado policial. (JGZ)