*** Es verdaderamente adecuado usar el término de como vuela el tiempo. Han pasado nueve meses y 10 días desde que inició el 2024 y no ha habido un solo día en los EEUU que se deje de vivir el drama debido a las elecciones el 5 de noviembre. El año se inició con Joe Biden que estaría enfrentando a Trump, pues para entonces el expresidente tenía el poder completo sobre los republicanos. Tampoco se veía a alguien en aquel entonces que estaría tratando de quitarle la nominación demócrata al actual gobernante.
Los meses seguían andando. Joe Biden obtuvo fácilmente la nominación presidencial del partido demócrata. Por su parte Trump fue electo por unanimidad por la convención republicana. Hubo un debate que pasará a la historia entre Trump y Biden.
Ese debate fue televisado patrocinado por la cadena CNN empezó con Biden con cara de no estar bien de salud y no olvidamos que él tenía en esa fecha 81 años de edad, luego de verse que no andaba bien, se enredó todo en una pregunta y luego olvidándose de algunas palabras. Biden se mejoró un poco y siguió el debate, pero la gente no se olvidaba de los primeros diez minutos.
Fue al terminar el debate que surgieron muchos miembros prominentes del partido demócrata que comenzaron a decir que debía renunciar a su candidatura y permitir a Kamala Harris para que ella lo reemplazara. En ese momento una gran mayoría del pueblo pensó que Trump tenía amarrada la presidencia si Biden seguía siendo su rival.
Le tomó a Biden varias semanas de deliberación y luego salió diciendo que se retiraba después de cerca de 46 años de servicio público. Esa cifra de servicio público incluía 32 años como miembro del Congreso, 8 años de vicepresidente y luego como presidente de la nación.
Biden seguirá gobernando hasta el 20 de enero del año entrante y ese día entregará el poder a su sucesor. Una vez que Biden se retiró, Kamala entró de lleno a la contienda y escogió a Tim Walz como vicepresidente. Los primeros dos meses de la campaña de ella tuvieron excelentes resultados y en el debate contra Trump moderado por la cadena de televisión ABC, ella le ganó claramente.
Quedan 21 días pueden pasar cosas, pero por el momento tenemos un empate técnico entre los dos candidatos. Trump busca a como de lugar el voto afroamericano y al voto latino que pueden ser vitales en estos comicios. Trump insiste en que la economía, la frontera y otros temas, mientras que Kamala está luchando por retener el voto hispano y el voto de los de la raza negra. También hay independientes que no se han pronunciado. Así están las cosas en un empate técnico entre los dos rivales. A cuál de ellos le tocará quedarse con la guayaba. Será el público votante que nos de la respuesta.
Algo importante es que nunca se ha gastado tanto dinero en una campaña política como está ocurriendo en esta.