Las medidas de defensa, protección y neutralización de los bosques de La Mosquitia, que forman parte del Corredor Biológico Mesoamericano en Olancho y Gracias a Dios, fueron intensificadas de manera urgente, por el gobierno, para frenar la deforestación y conservar las zonas núcleo de las áreas protegidas.
De acuerdo a la “Estrategia Cero Deforestación al 2030”, la destrucción de los bosques y delitos ambientales no pueden permitirse y no son negociables, además, en la zona afectada se ubica la Reserva de Biosfera de Río Plátano, declarado como Patrimonio Mundial por la UNESCO.
La intervención en las zonas de Biosfera de Río Plátano, Reserva Tawahka Asangni, río Patuca, río Segovia y la Cordillera Entre Ríos, en los departamentos de Olancho, Gracias a Dios y Colón, continuarán por parte del Gobierno de Honduras, en el marco de la Estrategia de Cero Deforestación al 2030.
Toda actividad relacionada a la deforestación o cambio de uso del suelo por cultivos ilícitos o ganadería extensiva, dentro de las zonas núcleo de las áreas protegidas, constituye un delito penal, según la Ley Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre y el Código Penal vigente.
Por lo anterior, no se permitirá ningún tipo de acuerdo que permita la tala desmedida del bosque, la expansión o introducción de la ganadería y agricultura, construcción de carreteras y asentamientos humanos y otros cultivos ilícitos, dentro de las reservas naturales destinadas, por decreto, exclusivamente para su conservación absoluta.
CINCO MIL HECTÁREAS
Desde julio del 2024 a la fecha, se han detectado 5,439 hectáreas como alertas de deforestación en los departamentos de Olancho y Gracias a Dios, lo que ha encendido las alarmas y ha acelerado las acciones del gobierno para combatir la destrucción de los bosques en estas zonas.
Estas cifras subrayan la magnitud del problema y la necesidad de una intervención rápida y efectiva para proteger estos ecosistemas esenciales.
DATOS
Las amenazas que destruyen de forma insostenible los bosques de La Mosquitia son múltiples, entre ellos las aperturas ilegales de caminos y carreteras, ganadería y agricultura extensiva e insostenible, acaparamiento ilegal de tierras, instalación de narcolaboratorios y plantaciones ilícitas. Asimismo, venta de tierras nacionales e indígenas a privados, invasión y usurpación de tierras indígenas, cacería y tráfico de vida silvestre, asentamientos humanos en zonas núcleo e incendios forestales.
PARA SANEAR TIERRAS
MISQUITOS PIDEN AYUDA
Los pueblos originarios de La Mosquitia han sido desplazados de sus tierras por invasores vinculados al crimen organizado, tierras indígenas que fueron entregadas por el Estado de Honduras, mediante títulos comunitarios, a favor de los concejos territoriales indígenas misquitos.
Los pobladores ahora solicitan al gobierno que intervenga, para que se realice un saneamiento de sus tierras y saquen a las personas que han llegado a deforestar el bosque, generar conflictos y hacer negocios ilícitos en su territorio.