Con casi cuatro meses de antelación llegó este año la Navidad a tiendas hondureñas, una festividad esperada por comerciantes, debido a que sus ventas incrementan en forma significativa en relación al consumo que se presenta en otras celebraciones.
Analistas coinciden que en el comercio se adelanta esta festividad cristiana en la que se conmemora el nacimiento de Jesucristo, como una forma para preparar al consumidor con estrategias visuales y emocionales, al hacerles sentir la emoción que cada vez falta poco para la Navidad y Año Nuevo, y hacer apartados.
La economía se dinamiza con el desembolso de unos 15 mil millones de lempiras por concepto de aguinaldos de parte de sector privado y gobierno, en el caso de empleados públicos, son acreditados a partir de la primera semana de diciembre.
Datos oficiales muestran que las importaciones de productos navideños generalmente inician desde agosto, luego se fortalecen en septiembre de cada año. Lo que más venden son árboles, luces y artículos para decorar, también repuntan ventas de apartados de línea blanca, entre otros bienes para el hogar como muebles y camas.
El reporte aduanero coincide con cifras del Banco Central de Honduras (BCH) en referencia a egreso de divisas, al pasado 15 de agosto que fue de 11,413.9 millones de dólares, de esa cantidad 8,839.5 millones de dólares, de destinaron para importaciones clasificadas en productor terminados ($7,219.5 millones) e insumos ($1,555.7 millones).
En estas denominadas temporadas altas, Puerto Cortés, recibe el 85 por ciento de las mercancías, en especial de compras en el extranjero que registran crecimientos del 15 por ciento en comparación a épocas normales.