Las dilataciones en el proceso de revisiones entre el Gabinete Económico Hondureño y el Fondo Monetario Internacional (FMI) complica aún más la ejecución presupuestaria a criterio de analistas económicos.
El economista, Julio Raudales, señaló que la baja ejecución que se ha reportado durante este año, no se debe fundamentalmente a la baja capacidad de ejecución, sino al hecho de que no hay dinero.
“Los recursos están bastante escasos, la primera revisión del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional no se hizo en marzo y esto impidió que se desembolsaran 118 millones de dólares que eran para apoyo presupuestario”, explicó Raudales.
“Ahora vamos a septiembre, veremos si la misión del Fondo viene para hacer esta segunda revisión de la que va a depender, que se depositen otros 118 millones de dólares”, confió.
“Si se lograra pasar esta revisión entrarían en el gobierno 236 millones de dólares, que no han entrado al presupuesto y que se suponía que estaban programados”, expuso.
Adicionalmente, Julio Raudales teme que las metas de recaudación tributaria no se estén cumpliendo adecuadamente. La fuente remarcó que la tasa de interés mundial está bien alta y los préstamos están más caros y eso impide también que se vendan bonos soberanos como se hacía previamente.
“Este año se pretendían recaudar 145 mil millones de lempiras y hay que ver si esta meta se está cumpliendo. Hay que recordar que el presupuesto del Gobierno Central para este año es de 248 mil millones de lempiras. Si tienen 145 mil millones de lempiras que se van a recaudar en impuestos, quiere decir que hay 103 mil millones de lempiras que se deben suplir con alternativas de financiamiento y obviamente la más importante de todas es el endeudamiento”.
Por su parte, el jefe del departamento de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Henry Rodríguez, coincidió que “el atraso en la negociación con el Fondo Monetario Internacional tiene impacto para Honduras porque el FMI no solo es un proveedor de recursos sino un aval que abre las puertas al gobierno”. “Negociar con el Fondo mejora la imagen del país y da apertura hacia los mercados internacionales”, concluyó Rodríguez. (WH)